El mercado online se ha convertido en un entorno altamente competitivo y en donde se puede encontrar prácticamente cualquier artículo que nos imaginemos. Es justamente el resultado de este desarrollo, lo que hizo que en 2019 el comercio electrónico en México alcanzara un valor de $631 mil millones de pesos, esto supuso un crecimiento de 28.6% respecto al año pasado*; La contingencia mundial aceleró la expansión de este sector.
Las tendencias de la venta online para el año que viene, se ven influenciadas indudablemente por los acontecimientos relacionados al aislamiento físico y la imposibilidad de asistir a los puntos de venta reales, por lo que la pandemia puede ser el mayor potencializador para el ecommerce desde que esta figura apareció.
¿Qué esperamos ver para el 2021 en el comercio electrónico?
Estrategia digital con enfoque en el punto de venta: El poder ofrecer al cliente diferentes vías de comunicación y consumo, abre muchas puertas, sobre todo cuando se focaliza la estrategia digital en la tienda física. Un ejemplo de este ejercicio son los servicios Pickup, en dónde se empuja la venta en línea y al mismo tiempo la rotación de stock del establecimiento local, otorgándole al cliente la posibilidad de pasar a tienda únicamente a recoger sus compras y tener los productos sin tener que esperar el envío.
Monederos digitales y pago aplazado: Es momento de contemplar nuevas formas de pago, con el propósito de que el proceso de compra sea cada vez más fluido y sencillo. Los monederos digitales suponen un ahorro de tiempo, al evitar el proceso para ingresar datos bancarios y proporcionar la misma seguridad en la transacción. Por otra parte, los pagos a plazos se hacen cada vez más populares, pues disminuyen la sensibilidad al precio y perpetúan la fidelidad del cliente, principalmente cuando ofrecemos productos de alto valor monetario.
Redes sociales y contenido comprable: El contenido social se ha posicionado como un fuerte canal de venta, por el atractivo con el que se presenta. Los usuarios reconocen de inmediato un anuncio y lo pasan de largo por el simple hecho de ser material promocionado, no pasa lo mismo cuando se presenta como una publicación o recomendación en redes, que capta la atención del cliente al tener una narrativa mucho más cercana. Por ejemplo, las marcas suelen usar Instagram como un escaparate virtual para después dirigir el trafico a la tienda virtual.
Realidad aumentada: Uno de los principales miedos que aún prevalece para las compras en línea, es la incapacidad de ver el producto físico y la incertidumbre de no saber si realmente es lo que se muestra, por lo que la tecnología de realidad aumentada puede ayudar a cerrar esta brecha y hacer el contenido mucho más interactivo. No por nada, se pronostica que el gasto en realidad aumentada crecerá un 71.6% para 2022.
Personalización: Aunque no suele ser una estrategia fácil de implementar, vale la pena incluir la tecnología y analítica necesarias para generar anuncios personalizados, que ofrezcan a los consumidores una comunicación específica y relevante, acordes a sus gustos y necesidades. Más del 75% de los consumidores esperan que las marcas brinden experiencias consistentes y de valor.
Medio ambiente: Ya hemos mencionado anteriormente, la importancia de la sustentabilidad y la ecología en el consumo actual, y es que el cuidado del medio ambiente se ha convertido en un tema de moda impulsado por el contexto global que estamos viviendo. El 50% de los consumidores, aceptan que sus compras se ven influenciadas y condicionadas por la perspectiva sustentable que tienen de las marcas.
YOPTER BIG DATA MADE EASY
*Estudio de Comercio Electrónico 2020, Asociación de Internet.Mx